IV.v Entran la REINA y HORACIO.REINANo quiero hablar con ella.HORACIOInsiste en veros, desvaría. Su estado da pena.REINA?Qué quiere?HORACIOHabla mucho de su padre, de las trampasde este mundo; balbu
IV.vi Entra HORACIO con un CRIADO.HORACIO¿Quiénes son los que quieren hablarme?CRIADOSMarineros, señor. Dicen que os traen una carta.HORACIOQue pasen.[Sale el CRIADO.]No sé quién en t
IV.vii Entran el REY y LAERTES.REYTu conciencia debe ahora sancionarmi absolución, y tu pecho acogerme como amigo,pues has podido oír y comprobarque el hombre que mató a tu noble padreatentaba cont
V.i Entran dos RÚSTICOS [L1][el ENTERRADOR y su COMPAÑERO].ENTERRADOR ¿Se va a dar cristiana sepultura a la que conscientemente buscó su salvación?COMPAÑERO Te
V.ii Entran HAMLET y HORACIO.HAMLETDe eso nada más. En cuanto al resto, veamos.¿Te acuerdas de todo mi relato?HORACIO¡Cómo no acordarme, señor!HAMLETHabía en mi alma una especie
Estaba agotado, agotado hasta no poder más, por aquella larga agonía. Cuando, por último, me desataron y pude sentarme, noté que perdía el conocimiento.La sentencia, la espantosa sentencia de mue
Un día entre los días, mientras estaba en el zoco, indolentemente apoyado en su espuerta, se paró delante de él una mujer con un ancho manto de tela, de Mussul, en seda sembrada de lentejuelas de
La joven llamó, y las dos hojas de la puerta se abrieron. El manda?dero vio entonces que había abierto la puerta otra joven, cuyo talle, ele?gante y gracioso, era un verdadero modelo, especialmente
Tenía por costumbre echar las re?des sólo cuatro veces al día y nada más Un día entre los días, a las doce de la ma?ana, fue a orillas del mar, dejó en el suelo la cesta, echó la red, y estuvo
?Qué tristeza! ?Sobre la tierra nin?guna, recompensa es igual al mérito ni digna del esfuerzo realizado por alcan?zarla!?Salgo de casa a veces para buscar candorosamente la fortuna; y me ente?ran de